La primera participación de «Toyota» Dávila fue para batir récord en el maratón Marimurumendi

Reseña que sobre el Hijo de La Mesa de Esnujaque, Samuel Dávila, saliera publicado en el portal Valera Noticias y firmado por la periodista Patricia Araujo:

El hijo de La Mesa de Esnujaque sube peldaños en las competencias de trail running 
Fotos: carrerasdemontana.com/IG: lafraguarun

La carrera de montaña celebrada en el País Vasco sirvió de escenario, para que Samuel "Toyota" Dávila rompiera el récord en 42 kilómetros

Por primera vez Samuel Dávila participa en la carrera de montaña Marimurumendi, una de las tres categorías del Ehunmilak Ultra Trail 2019, en el País Vasco y ha quedado para la historia el récord impuesto en la distancia de 42 kilómetros y 2.300 metros de desnivel positivo.
«Toyota» Dávila se ha convertido, en el primer lugar del maratón Marimurumendi logrado en 3 horas, 29 minutos, 18 segundos dejando atrás el tiempo, del experimentado corredor Aritz Egea quién corrió esa distancia en el 2016 en 3 horas, 31 minutos. 
El hijo de La Mesa de Esnujaque se lució en Beasain, provincia de Gipuzkoa demostrando que su perfil va en ascenso y es capaz de superar retos, en las montañas europeas.

«Haber ganado la carrera, hacer buen tiempo e imponer récord superando el del competidor élite Aritz Egea, quién participa en eventos del circuito mundial, quiere decir que ando en buen nivel, y eso es importante» comenta «Toyota» Dávila.
Sus familiares y amigos celebraran en el estado Trujillo, así como en Colombia, Chile y España donde actualmente se encuentran, algunos de ellos. 
«Realmente fue un viaje muy divertido en el País Vasco, lo más importante es disfrutar de la carrera, la montaña y quedarse con esos bonitos recuerdos» comenta en el contacto con Valera Noticias. En la Ehunmilak participaron 1.300 personas de 17 países. 
Al ser consultado sobre el Marimurumendi explica que fue invitado por Joxemi Cobos, parte de la organización del maratón a quién conoció durante la carrera OCC Chamonix-Francia, el año pasado; aceptó la propuesta e hizo historia, una cuenta más para su ascenso en el trail running, en esta oportunidad con el número 2031 y patrocinio de Inverse.
A finales de junio del corriente Samuel tuvo otra grata experiencia, en la maratón de trail Ultra Ulldeter (44Km-2500 D+).
En Catalunya-España hizo la participación y cruzó la meta en 4 horas, 29 minutos, 50 segundos.

Haciendo un análisis de la participación entre la última y penúltima carrera, hay una clara señal de constancia en el trabajo duro que emprendió Samuel, la fuerza de «Toyota» y su casta andina venezolana para reducir 1 hora, el tiempo recorrido en la distancia de 44 kilómetros. Sobre ese punto refiere el corredor que la carrera se prestaba para la velocidad, porque había menos desnivel y distancia, y el terreno: «no era nada técnico». 
Manifiesta sentirse feliz y contento, pero su tono de voz y personalidad apenas dejan fluir los detalles de una victoria tras otra, con una sencillez y humildad abismales. Le preguntamos si ha alcanzado su sueño, el de correr con los grandes en competencias de alto nivel y la respuesta, fue totalmente inesperada.
«Es complicado hablar concretamente sobre un sueño único, pero si puedo soñar con muchas cosas, como vivir para correr y viceversa, darle libertad a mi espíritu mientras recorro montañas, disfrutar y aprender de cada experiencia compartida con tantas personas, que sienten este deporte como una pasión, como un estilo de vida y como un deporte que más allá de la competición está basado en vivir y sentir la montaña» indica el corredor. 
Insistimos en catalogarlo como el mejor corredor trail running del país, y siendo trujillano el orgullo nos aflora cada vez que anuncia una participación, pero el mismo Samuel nos hace «tocar tierra» porque no es la fama ni el reconocimiento lo que le place, sino la experiencia de disfrutar el deporte que es su vida y compartirla con sus rivales, como semejantes y hermanos en la pasión del trail. 
Al respecto deja aflorar sus sentimientos, con la libertad de la escritura, así como lo hiciera su padre, el poeta esnujaquense Roberto Dávila. 
En ese sentido recuerda que quiere: «soñar con que cada viaje a cada lugar, donde hay montañas sea un reencuentro con el yo interior y comprender la esencia de la libertad, que desde el alma nace para admirar la naturaleza que nos rodea. Soñar a ser un corredor que más allá de querer estar adelante, aprende a sumar recuerdos inolvidables que luego serán historias para contar». 
La próxima cita de trail running sería en el mes de septiembre, a menos que no aguante «dos pedidas» como se dice popularmente, y se una a alguna competencia para el mes de agosto.